martes, 7 de mayo de 2013

Relato VII..Encadenado



ENCADENADO
      
    Llegue al lugar de encuentro de MyDama a eso del mediodía. Ella me esperaba y yo estaba ansioso e ilusionado, porque nuevamente, iba a quedar a su merced.

     Me enseño su casa y sus cosas; y seguidamente me ordeno desnudarme, deje toda mi ropa en su salón y me indico que fuera a la habitación. Me hizo acostarme sobre su cama, boca arriba, y comienzo a sacar unas cadenas que previamente había dejado preparadas en cada una de las cuatro patas de su cama.

    Yo quieto, en ese momento, Ella me fue encadenando mis manos y pies a cada una de las cadenas. De repente, inmóvil, solo podía moverme con el juego que la propia cadena por su longitud dejaba. Estaba sujeto, sin escapatoria, solo al antojo de MyDama.

   Una vez que terminó de encadenarme, me vendo los ojos. Pasaron unos segundos y escuche como cerraba la puerta de la habitación. Intuía a MyDama al otro lado de la habitación, moverse, cambiarse de calzado, y yo allí, encadenado a su cama, inmóvil, con los ojos vendados y en silencio.

    Iban pasando los minutos, de vez en cuando escuchaba el sonido que MyDama hacia al andar por su casa, yo no sabía que iba a ocurrir, MyDama podría entrar en cualquier momento o dejarme allí tanto como a Ella le placiera.

    Escuche el sonido de la puerta abriéndose y los tacones de sus zapatos golpeando el suelo de su habitación acercándose hacía mí...

    Note como mi cuerpo se ponía en tensión.

    El sonido de su gato inundo el silencio del momento, acabando sobre mi pecho. Lo notaba, dolía pero era placentero. Cuando me infligió los gatazos que Ella creyó oportuno tomo el dildo y me sodomizo con él.

    Así estaba yo, encadenado a su cama, sodomizado y a expensas de la siguiente acción a realizar por MyDama sobre mi cuerpo.

    Me quito la venda de los ojos y la puede ver, llevaba una camisa blanca de manga corta, encima un corset azul, una falda negra y unos bonitos zapatos negros, cerrados, de tacón de aguja y puntera afilada con la suela en un bonito color rojo, y su melena rubia recogida en un moño. Quede hechizado por tan bonita estampa, en esos momentos mi cuerpo solo deseaba seguir siendo utilizado por Ella.

   Tomó nuevamente su gato y comenzó a sacudirme con él sobre mi pecho, era una sensación totalmente diferente a la vivida instantes antes, ahora yo veía en todo momento cuando Ella tomaba la acción de someterme con el gato, y como el gato llegaba hasta mi piel. No podía por
menos de poner mi cuerpo en tensión cuando intuía que esto iba a ocurrir. Hizo que el gato encontrara mi pecho en varias ocasiones, veía como el gato me golpeaba, pero también veía como su rostro radiaba alegría por la posición en la que Ella se encontraba frente a mí.

   Soltó el gato, se descalzo, se subió a la cama, me volvió a colocar la venda en los ojos y quedándose de pies en la cama, comenzó a jugar con sus pies sobre mi rostro. Me ordeno sacar la lengua y la utilizo para darse placer en las plantas de sus pies. Pasaba sus pies sobre mi rostro. 

   Me hizo abrir la boca y me introdujo uno de ellos en la misma, metiéndomelo todo lo que mi boca abierta daba de si. Yo intentaba que no me ocurriera lo del día anterior, no quería sentir la sensación de asfixia para no tener que parar en ningún momento el juego (nunca lo he hecho).

  Me metió y saco su pie de mi boca en varias ocasiones. Se coloco de rodillas apoyando sus piernas sobre la cama a la altura de mi pecho y quedando mi cuerpo debajo del suyo. Tomo una copa con agua, bebió, inclino su cabeza hacia la mía dejándola a escasos centímetros, y comenzó a dejar salir de su boca el agua, abrí mi boca y comencé a beber, parte del agua me entraba en mi boca y parte por mi nariz, MyDama me estaba calmando la sed con toda su esencia. Dejo la copa sobre la mesilla, y sin cambiar su posición me dijo que volviera a abrir la boca, lo hice, Ella ya no tenia agua en la suya. Volvía a inclinar su cabeza sobre la mía y comenzó a escupirme dentro de mi boca, de una forma tranquila, sensual y excitante. Veía como su esencia salía de su boca lentamente, se deslizaba entre sus labios y caía hacia la mía, llenandome, en ese momento de placer.

   Una vez que me lleno con su saliva mi boca, adelanto sus rodillas hasta colocarlas sobre mis brazos, coloco su entrepierna en mi rostro y comencé a darla placer con mi boca y rostro hasta que Ella lo considero necesario. Por el medió, sus rodillas se clavaron en mis bíceps, ocasionándome dolor y algún que otro moratón.

    Había pasado el tiempo, eran más o menos las tres de la tarde. Me desencadeno de su cama y me indico que fuera a la cocina a prepararle la comida, lo hice. Llegue a la cocina, me coloque un delantal siguiendo sus instrucciones y comencé a prepararle al comida, la cual solo diré, que era algo que Ella no había nunca comido, intente sorprenderla y creo que lo conseguí, lo que ya no se si tanto mas o menos que lo que Ella me sorprendió a mí con su siguiente acción.

   Yo preparaba la comida en su cocina, sin parar de mover la salsa de queso que estaba realizando para que no se me quemara. Ella se ausento de la cocina, regreso por mi espalda y me advirtió de que no se me quemará la comida. De repente, note como me intentaba sodomizar con algo muy frío, helado, lo intento en varia ocasiones, no se cuanto llego a penetrarme con ello, pero llegue a notar que me quemaba debido a lo frío que estaba. Ella seguía intentándolo, y yo, según Ella, daba saltitos sin dejar en ningún momento de mover la salsa al fuego para que no se me
quemara. Estaba intentando sodomizarme con un condón lleno de agua congelada.

   Cuando terminamos el intento de sodomización con el hielo y de terminar de hacer la comida, la serví y nos fuimos a su salón a comer. Ella disfrutaba comiendo lo que la había preparado, y yo orgulloso de ello, de nuevamente haber complacido a MyDama.

   Y Ella me lo agradeció, de una forma bella, como lo es Ella, alimentándome de su propia boca. Tomaba con su tenedor la comida, la masticaba en su boca, me pedía que me acercara giraba su rostro, acercaba su boca a la mía, yo la abría, y Ella me alimentaba nuevamente con toda su esencia, dándome el alimento ya masticado por Ella misma.

   Terminamos de comer, recogimos el salón y me ordeno que me tumbara sobre la alfombra del salón. Lo hice, como siempre, rápidamente. Ella se sentó en su sofá, a mi lado, con su vestido negro y nuevamente esos bonitos zapatos de tacón de aguja y puntera afilada. Y comenzó a jugar con sus zapatos y sus pies sobre mi cuerpo. Y note uno de los momentos más excitantes que he vivido con Ella, cuando tomo uno de sus zapatos, se lo quito de su pie, lo tomo con su mano y lo dirigió hacia mi pene excitado, rozándome sobre él con la suela del zapato.

   Se cambio de posición, se sentó frente a mi, en el sofá, yo seguía tumbado en su alfombra, me hizo abrir mis piernas, metió las suya entre las mías y comenzó a pisarme, mi polla, mis huevos, mis manos, y toda esa zona que tanto placer produce entre el ano y los genitales. Cada vez lo realizaba con más intensidad, cada vez me estaba excitando mas, hasta tal punto, que estando tumbado boca arriba en la alfombra, mi cuerpo medio levitaba, apoyando en el suelo solamente mis plantas de los pies, mis hombros, mi cuello y mi cabeza.

   Jugo y jugo conmigo durante todo el día.


   Se recostó en su sofá y me pidió que la diera placer y así lo hice: Ya me conocen, por respeto a MyDama, esta parte me la reservo solo para Ella.

   Solo espero, como sumiso complaciente que deseo ser hacia MyDama, que Ella disfrutará de este día tanto como Ella me hizo disfrutar a mí.


cuero_de_LD

5 comentarios:

  1. Me gusta el relato-vivencia que has tenido hacia tu Dueña. El placer del Ama por regla general nunca está por delante del de tu Dueña, ya que el placer de ésta es el placer del sumiso por tener el honor de servirle.

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    1. Quise decir, (...)El placer del Ama por regla general nunca está por delante de el del sumiso(...). Esto lo digo por depender el de éste último del de su Dueña. Si Ella obtiene placer, obviamente él obtiene lo mismo.
      Creo haber aclarado mi error.

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    2. Ya me parecia a mi raro el comentario anterior jajajajjaja xd

      Su placer está naturalmente, supeditado al mio propio. Él como buen sumiso, disfruta en el preciso momento de que Yo lo hago...Desde el cumplimiento de la orden o petición más simple al hecho de practicar algo más complejo.

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    3. Fíjese si era raro, que me di cuenta en cuanto pulsé el botón de publicar. jajaja. El sentimiento es recíproco.

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  2. Hola,

    Sólo decir, que envidia, de relato, de fotos...

    Disfrutadlo mucho tiempo, y subid muchas fotos, que es bueno ver que hay personas en este mundo a las que les va bien, anima mucho a los demas.

    Un saludo.

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